Pasamos a la parte del copyrighting, que probablemente es la que más odiamos los Seos. Aquí habrá que revisar que cada URL conteste de una forma satisfactoria la intención de búsqueda del usuario. Habrá que mejorar el copyrighting para guiar a nuestros usuarios a hacer lo que necesitamos en esa URL, interactuar, comprar, seguir, leer más artículos… Todo dependerá de cual sea el contenido. Pero no solo bastará con el contenido escrito del propio texto, habrá que revisar los títulos, los metatítulos, los Slug, la estructura para mejorar y facilitar la lectura, los call to action etcétera. El optimizar a nivel de copy una página web es un arte y una carrera profesional aparte, pero nunca está de más echarle un ojo para mejorarla en lo que podamos. Y si podemos contratar a un profesional del sector ya sería perfecto.